Por algo se dice que Split es el centro cultural de toda la región dálmata. Es la segunda ciudad más grande de Croacia. Está llena de arquitectura histórica, restaurantes, bares y parques, pero también rebosa de la ajetreada vida de una gran ciudad.
Todo el mundo ha oído hablar del Palacio de Diocleciano, protegido por la UNESCO, pero ¿qué más puedes hacer en Split?
Muchos desisten de visitar Split durante los meses de verano precisamente por las grandes aglomeraciones. Tanto si vienes en autobús como en avión o en tu propio coche, nadie quiere perder el tiempo en largos atascos o buscando aparcamiento.
No te preocupes, también lo hemos tenido en cuenta. Un poco más sobre aparcamiento asequible en Split más tarde. Echa un vistazo a lo que debería animarte a visitar esta ciudad tan especial.
¿Qué ver en Split?
Han pasado 1.700 años desde su construcción, pero Diocleciano aún reconocería hoy su Palacio. Por supuesto, tenemos que mencionarlo, no sólo porque es un monumento de la UNESCO, sino porque la entrada es gratuita, es lo bastante grande como para mantenerte entretenido durante horas y fue lugar de rodaje de Juego de Tronos.
No debes perderte las cuatro entradas principales del Palacio, el mercado de recuerdos del sótano y, tras la visita, sentarte a tomar un café en la Riva.
Mientras estés allí, sube a la Catedral de Split, desde la que tienes mucho que ver: una vista encantadora de la ciudad y el mar. También puedes ver la puesta de sol en Split, todas las tardes. Se ve mejor desde la Riva, mientras te sientas con una bebida, el cielo anaranjado te rodeará por todas partes.
Puedes encontrar otra vista de la ciudad si subes al Marjan. Hay muchos escalones que llevan a la cima, pero sólo cuando llegues verás por qué ha merecido la pena. Una vista panorámica que entrelaza la ciudad, el mar, las islas y los veleros blancos del mar Adriático. Marjan está rodeado de un bosque, así como de iglesias escondidas que puedes visitar. Cerca está Matajuška, una pequeña bahía donde encontrarás numerosos lugares para pasar el rato.
Si vienes en el momento en que el Hajduk tiene un partido en el Poljud, no te pierdas la energía y el ambiente de un partido así. El Teatro Nacional Croata también organiza a menudo interesantes programas nocturnos. También hay numerosos museos en Split, para los amantes de la historia y el arte.
¿Qué probar en Split?
Aunque en Split predomina la cocina típica dálmata, con muchas especialidades de pescado y carne, las cosas han cambiado en los últimos años. La oferta se ha ampliado, así que ahora tienes numerosos restaurantes con especialidades gastronómicas de toda Croacia. Puedes probar fácilmente el prosciutto, así como las trufas blancas.
En cada esquina hay panaderías o lugares de comida rápida donde puedes comer barato, incluso con opciones vegetarianas. Las pizzerías también son un punto fuerte, puedes comprar porciones, que suelen ser más baratas.
Los mercados locales de Split son ricos en todo tipo de frutas y verduras mediterráneas, así como en pescado fresco. Aunque no quieras cocinar tú mismo, te recomendamos que des un paseo y sientas el ambiente de la gente local. Si no hay nada, al menos para degustar auténticos aceites de oliva o productos similares.
En cuanto a las bebidas, hay numerosos bares y cafés a cada paso. Split es conocida por su vida nocturna, no sólo por los numerosos festivales que se celebran a lo largo del año, sino también por sus discotecas.
¿Dónde aparcar?
Prometimos ayudarte también con el aparcamiento. Dado que la mayoría de las cosas de la lista están justo en el centro de Split, podrías pensar que el aparcamiento será excesivamente caro e imposible de encontrar. Sin embargo, hay opciones de aparcamiento asequibles en una ubicación estupendajusto al lado del propio centro de la ciudad.
Tanto si vas a pasar el día en la playa de Bačvice como si vas a visitar todo lo recomendable, desde este aparcamiento sólo tienes 10 minutos a pie hasta el corazón de Split. Este aparcamiento está en un garaje, que tiene muchas ventajasespecialmente en los días de verano. Tu vehículo estará protegido de las altas temperaturas, sin sufrir daños por el sol, pero también bajo la vigilancia de cámaras de seguridad, lo que aporta un alto nivel de seguridad.
Ahórrate el estrés y reserva tu plaza de aparcamiento con antelación, para que la principal preocupación sea aquello para lo que has venido: conocer Split.
¿Qué visitar cerca de Split?
Si ya tienes vehículo propio, aprovéchalo y visita muchos lugares cercanos a Split. Aunque también se puede acceder a Solin en autobús, llegarás a este lugar histórico tras sólo 5 km en coche. Allí podrás ver los restos de la antigua vida de los romanos, con numerosos objetos y mosaicos.
Para quienes deseen vistas más hermosas y no quieran conducir demasiado, está la Fortaleza de Klis, que se ha fundido con la montaña y desde la que puedes ver toda la ciudad desde una perspectiva más amplia. Trogir está a sólo media hora en coche, y puedes pasar un día entero explorándola.
Si tomas la autopista, estarás cerca de dos hermosos Parques Nacionales de la región: los lagos de Krka y Plitvice. Si conduces un poco más lejos, puedes parar en Zadar un par de horas y escuchar el famoso órgano del mar.
Por supuesto, frente a Split también hay numerosas islas. Disfruta de un crucero por el mar Adriático, visita Brač, Hvar, Vis o Šolta, y contempla interesantes cuevas azules, calas y playas escondidas. En las islas conocerás mejor la vida de los lugareños.
Split tiene una oferta variada, tanto si te interesa visitar monumentos históricos y culturales, como degustar especialidades gastronómicas tradicionales, la vida nocturna o visitar el resto de la región. Todo es fácilmente accesible, y si has resuelto el problema del aparcamiento, ¡no tienes otras preocupaciones!